Como para cualquier línea aérea, el avión era la principal aplicación de marca. Para su diseño existía un reto añadido; conseguir un diseño moderno y diferente manteniendo una base de pintura blanca. SKY recibe sus aviones en leasing blancos y luego debe devolverlos de la misma manera; moviéndose a un modelo de negocio low cost, cualquier inversión que se pudiera ajustar a la nueva realidad era bienvenida por la compañía.

La idea entonces era intervenir de la forma más inteligente posible; manteniendo la base blanca y buscando soluciones minimalistas pero impactantes. Bajo este criterio, el logo cambia su diseño, dependiendo del lado del avión en que se encuentre, para asegurar que la flecha siempre apunte hacia adelante.

En las aletas traseras, donde prácticamente cualquier línea área sería irreconocible, conseguimos que SKY destaque con el uso del verde.

Para la aleta vertical trasera se ha decidido colocar la flecha centrada en una banda morada que no cubriese toda la aleta, sino que dejase un espacio libre tanto en la parte superior como inferior. Esto rompía con las tendencias del sector y enfatizaba el mensaje de dirección. Las flechas verdes sobre la banda morada siempre apuntan hacia adelante.

Se exploraron diferentes caminos a través de los distintos elementos de la marca, para crear un ritmo visual que le sirviera a SKY para comunicar no solo en el momento de su relanzamiento sino también de cara al futuro.